Pastel de patatas y carne Picada

Ingredientes para hacer Pastel de Carne (para 4 personas):

  • 600 gramos de carne picada (puedes usar solo carne de ternera o mezclada con cerdo)
  • 750 gramos de patatas
  • 2 zanahorias grandes (unos 200 gramos en total)
  • 1 cebolla grande (unos 300 gramos)
  • 2 dientes de ajo grandes
  • 1/2 vaso de vino tinto (125 ml)
  • 2 vasos de caldo de carne (500 ml)
  • 6 cucharadas de tomate frito (unos 100 gramos en total)
  • 3 cucharadas de queso parmesano rallado (unos 50 gramos en total)
  • 50 gramos de mantequilla sin sal
  • 5 cucharadas de aceite de oliva (unos 50 ml)
  • agua
  • sal y pimienta negra

 

Receta para hacer Pastel de Carne (para 4 personas):

  1. Para preparar el puré de patatas pon a calentar 2 litros de agua con una cucharada pequeña de sal y cuece las patatas. Cuando las patatas estén cocidas pélalas y haz el puré. Luego añádele el queso parmesano, la mantequilla,  una pizca de pimienta negra molida y mezcla bien.
  2. Ahora preparamos las verduras para la carne. Pela los ajos y pícalos finamente. Pela la cebolla y la zanahoria. Ahora ralla la cebolla y la zanahoria con la ayuda de un rallador.
  3. En una sartén grande pon el aceite a calentar a fuego fuerte. Cuando esté caliente añade la cebolla, la zanahoria y el ajo. Deja a fuego medio alto hasta que la verdura coja algo de color.
  4. Entonces sube el fuego añade la carne picada y media cucharada pequeña con sal. Cuando tome color añade el vino y deja que se reduzca (hasta que casi desaparezca). Luego añade el caldo de carne y el tomate frito. Deja a fuego medio sin tapar hasta que se reduzca el caldo. La carne debe quedar con una salsa muy espesa y cremosa (pero no debe quedar líquido suelto). Cuando esté listo prueba de sal y si hace falta añade una poca más.
  5. Pon el horno a 200 grados centígrados (arriba y abajo) y con el grill encendido.Coloca la carne en una fuente apta para el horno y cubre la carne con el puré de patatas que hemos preparado.
  6. Mete en el horno y deja hasta que la superficie del puré de patatas se ponga dorada (unos 20 minutos). Y listo, ya tienes tu pastel de carne preparado. Fuera de la cocina y a comer!!!!

A comer:

Si no tienes caldo de ternera puedes disolver media pastilla de caldo de carne en medio litro de agua. En este caso tendrás que vigilar el punto de sal porque las pastillas de caldo concetradas aportan bastante sabor y sal a la receta.

Tienes que controlar bien la sal que echas porque el queso parmesano aporta un punto de sal y si el caldo también está salado el conjunto final puede quedar demasiado “sabroso”. Es mejor empezar con poca sal y ajustar al final.

Para hacer un buen  puré de patatas es mejor cocer las patatas con piel, pero si tienes prisa puedes hacer un puré de patatas rápido pelando las patatas y cortándolas en varios trozos del mismo tamaño. De este modo la patata se cuece antes y luego no tienes que esperar a que se temple para pelarla. El sabor del puré variará un poco, pero como en esta ocasión el puré va horneado y mezclado con otros ingredientes no se nota tanto la diferencia 😉

Como te he comentado al principio esta receta viene muy bien para aprovechar cuando nos sobra carne de otra comida.  Si optas por esta opción (en vez de usar carne picada) tienes que tener en cuenta que dependiendo de la receta  de donde saques la carne (potaje, guiso, caldo ….) el sabor de pastel cambiará bastante.

Por este motivo si usas sobras tendrás que adaptar la receta del pastel de carne. En algunas ocasiones tendrás que quitar algunos ingredientes (porque ya los lleva la carne de la receta de origen, como por ejemplo el vino) y en otras ocasiones solo tendrás que añadir el puré de patatas por encima, hornear y tendrás lista la receta 🙂

 

Pastel de Carne. Para preparar un pastel de carne puedes aprovechar los restos de un guiso que tengas en casa o la carne con la que preparaste un caldo. Pero también puedes hacer como en esta receta y empezar de cero usando un poco de carne picada (carne molida).

El resultado es similar y usar la carne picada te da la ventaja de que no tienes que esperar a tener sobras de otras recetas para preparar un pastel de carne.